martes, 26 de febrero de 2013

Literatura y política, por Israel González


Literatura y política

Israel González

José Revueltas aseguraba que escribía sobre temas políticos (ensayos, cuentos, novelas) porque sus experiencias desde muy joven habían sido de este tipo. 

En general, es posible afirmar que nuestras experiencias determinan, en mayor o menor grado, nuestras temáticas y nuestros estilos.

Ahora que el PRI ha regresado y se siente con todo el derecho de pisotear nuestros derechos aprobando una reforma laboral y educativa lesivas para los trabajadores, pretendiendo aumentar el IVA a medicinas y alimentos y privatizar PEMEX, etcétera, quiero compartir este poema escrito en mis años juveniles de estudiante universitario en la Universidad Autónoma de Chiapas:

MODERNIDAD

Modernos son los aires que nos corren
por dentro y por fuera.
La atmósfera es moderna, los árboles, la tierra.
Moderno es todo aunque no quiera
el obrero, el estudiante, el campesino, la bandera.
Modernos somos por decreto y en todos los discursos
que se dicen adentro y afuera.
Y quien diga que no: ¡Muera!
*
Moderno soy, pues, para no desentonar
con la historia de mi país,
y como buen creyente que mira y oye
y sigue con la cabeza hundida en la tierra.
*
Me levanté moderno, alegremente moderno.
Me vestí mis ropajes modernos: mezclilla y tenis
y una playera con la leyenda: Made in USA.
*
Pero la modernidad requiere ciertos sacrificios:
Debo aprender inglés y ocultar todo aquello que pueda recordar
-a ojos de nuestros compradores- mi origen,
mi triste y desastroso origen plebeyo.
*
Acataré las modas (como en tiempos de ese gran patriota que fue
Díaz. No, Ordaz no, Porfirio) europeas. Votaré por el PRI. Me compraré
unos lentes a prueba de miseria, de fraudes y mendigos. Me esforzaré
por ser un buen gentleman y como éste: demócrata, humanista. Le pediré
al Dios de la Prepotencia que se muera Fidel o deje Cuba. Aunque una invasión
en aras del progreso...¡Todo sea por el progreso!
*
Así, pues, nadie podrá decir que soy mal mexicano (en inglés).
Nadie podrá señalarme como otro nuevo reaccionario. Porque si he
de pasar a la historia como el obrero que soy, ha de ser por mi lealtad
al gobierno...de los Estados Unidos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario